No, no es un combate. Ambos tipos de agencias de comunicación tienen sus ventajas. En este post queremos tratar de explicar qué beneficios pueden aportar unas u otras, eso sí, teniendo en cuenta que la profesionalidad de los consultores será imprescindible en cualquiera de ellas.

Empecemos por las agencias grandes:

– Disponen de más recursos y equipos más amplios con especialización en distintos sectores.

– Ofrecen más servicios con departamentos especializados

– Muchas cuentan con delegaciones y oficinas en otros lugares, incluso fuera de España

– Eso sí, sus costes suelen ser más altos debido a una estructura mayor.

Sigamos por las pequeñas:

– También pueden estar especializadas en un determinado sector

– Suelen ofrecer presupuestos más bajos (tienen menos coste de personal, oficinas, etc.)

– Al disponer de un equipo más reducido, ofrecen menos variedad de servicios.

– Están obligadas a tener una buena red de colaboradores y proveedores que suplan tener menos personal.

– Suelen proporcionar una mayor personalización y un contacto más estrecho con los responsables de la agencia que pueden encargarse directamente de cuentas

Como vemos, es una generalización. Hay empresas muy grandes fabulosas con servicios excepcionales y hay pequeñas agencias que dejan mucho que desear. Y al contrario. Empresas enormes que se desentienden del cliente y consultores freelance con una mayor flexibilidad y capacidad de adaptación.

Lo importante, repetimos, la profesionalidad del equipo (desde la dirección al ejecutivo más junior). Y, a partir de ahí, la elección dependerá de presupuestos y objetivos – no tanto del tamaño.