Si nos atenemos a los datos de audiencia de plataformas y/o redes sociales como YouTube, Tik Tok o Instagram, llegaremos a la conclusión del auge del contenido audiovisual. Esto obliga a las marcas a pensar en estos formatos para acercarse a sus públicos e incorporarlos en su comunicación. Habrá que analizar cómo alinearlos con los mensajes de las compañías para que realmente sean efectivos.

De forma habitual, los mensajes que publicamos en cualquier red social se acompañan de imágenes (ya sea en forma de galerías, vídeos, ilustraciones, etc.). El objetivo es que aumente su visibilidad y que aportemos información o contexto. Porque esto es algo clave: las imágenes o el contenido audiovisual que utilicemos para nuestra comunicación corporativa no debe ser un mero adorno, debe dar valor. 

Más cosas que debemos tener en consideración:

• Quién es nuestro público: al igual que ocurre con el contenido de nuestros Blogs o redes sociales, tener claro el público nos ayudará a darle forma a ese contenido audiovisual. No es lo mismo crear un vídeo destinado a consumidor final que a públicos de entornos profesionales. Importante también alinearlo con los grupos de edad. 
• Qué recursos tenemos: qué herramientas y qué capacidad tenemos para poder crear contenido de calidad. 
• Cómo encajan en la estrategia corporativa: siempre deben formar parte del plan de comunicación y, lógicamente, de las campañas y estrategias de la empresa.
• Que se entiendan: que no haya dobles lecturas o interpretaciones. Importante especialmente en las infografías.
• Con todos los permisos: un aspecto fundamental para salvaguardar el derecho a la imagen. Hay que pedir autorización, más cuando hay menores.
• Formatos para canales: dependiendo de dónde queramos o cómo queramos difundir el contenido audiovisual, tendremos que elegir un formato u otro. 

Junto con lo dicho, también hay otros aspectos como los portavoces de los que dispongamos, la duración, el tipo de pieza (los podcasts están al alza) o incluso si serán necesarios subtítulos. El objetivo, no lo olvidemos, es que, si decidimos incorporar este tipo de contenidos a nuestra comunicación, lo hagamos de forma totalmente alineada con la estrategia corporativa.