En la era digital donde es muy fácil obtener vídeos y fotos con un móvil, hay que valorar la calidad de las imágenes. Sobre todo, desde el punto de vista de la comunicación empresarial. Por favor, no usemos fotos de una boda o de las vacaciones para ilustrar los mensajes corporativos.

Hay muchos estudios que muestran que la imagen es clave para generar las mayores interacciones en las redes sociales. Seguro que si la foto de un directivo en la playa en bañador ilustra la noticia, el éxito está asegurado, pero quizás haciendo una medición de la reputación el resultado será tan positivo.

Ante esto, qué es lo que hay que hacer, lo primero evitar que cualquiera sin unos conocimientos mínimos haga las fotos. Porque ya hemos hablado de que no siempre se valora el trabajo de escribir una nota de prensa, pero es que en el caso de las fotos, ya ni hablamos. Con eso de que todos tenemos ahora un móvil a mano, tomamos la foto con el Smartphone y no nos preocupamos de más.

Sin embargo, hay fotógrafos profesionales, muchos y muy buenos, capaces de hacer una sesión de fotos en la que se va a plasmar la imagen que la compañía quiere transmitir. Expertos que van a asegurar, no sólo el lado técnico de la foto (es decir, que el directivo parezca un directivo y no un ectoplasma), sino que además van a ser creativos y van a buscar otro punto de vista para hacer de la foto algo más que un retrato.

Por supuesto, no debemos utilizar fotos pixeladas, desenfocadas o tipo fotomatón a las que lo único que les falta es el cartel de “se busca”, y, por supuesto, las del DNI tampoco valen. Además, tienen que tener un mínimo de resolución, sobre todo, si se van a imprimir – mínimo 300 ppp (píxeles por pulgada). Ah y otra cosa muy importante, las fotos insertadas en documentos tipo .doc o .ppt, no suelen ser las más adecuadas porque no suelen tener buena resolución.

Una buena foto transmitirá si una empresa es desenfadada, cercana, divertida o muy formal y ayudará a emitir el mensaje que queramos dar.