Las notas de prensa son noticias corporativas. Deben contar novedades y alejarse de todo aquello que pueda considerase publicitario. ¿Cómo conseguirlo? Podríamos empezar diciendo que les quitemos la grandilocuencia y expongamos únicamente los hechos. En el post de hoy vamos a dar algunas pautas.

Una noticia siempre tiene una estructura:

– La de pirámide invertida. En el caso de las notas de prensa, deberíamos también seguirla. Esto significa que lo más importante debe ir primero y lo más accesorio al final. Así que en el primer párrafo o entradilla deberíamos responder a las 5 Ws del periodismo: Quién, Qué, Cuándo, Cómo, Dónde y Por qué.

Una vez hecho esto, tenemos que tener en cuenta otros elementos:

– Un titular atractivo, pero real y que responda a lo que estamos diciendo en el cuerpo de la nota de prensa.

– Un subtítulo o antetítulo que nos ayude a contextualizar e, incluso, unos sumarios o bullet points para destacar lo más relevante. Estos son de mucha ayuda a los periodistas porque de un vistazo pueden saber si la información es relevante para su medio.

– Es importante utilizar ladillos que separen las distintas ideas que contamos.

Todo esto en cuanto a estructura.

Pero además, debemos ser cuidadosos con el estilo:

– Tratemos de ser asépticos y dejar de lado todo aquello que aporte colorido al texto, pero no información. Por ejemplo, el uso de adjetivos suele ser poco recomendado si no aportan nada a la información.

– Añadamos datos, cifras, declaraciones y todo aquello que aporte y que diferencie nuestra información de otras similares.

En definitiva, tengamos en cuenta que una nota de prensa no es un folleto comercial. Su finalidad es otra, informar sobre las novedades, pero con la vista puesta en quién o quiénes van a recibir la información.

Debemos ofrecer una noticia adaptada, interesante, rigurosa y de calidad.