Hoy reflexionamos en el Blog sobre el contenido digital y sobre cómo hoy es más fácil que nunca tener a nuestra disposición información de calidad, pero también grandes niveles de desinformación. Por ello, desde aquí os animamos a ser críticos con lo que leemos.

La llegada de Internet ha traído consigo la democratización de la información, nuevos canales y medios de comunicación. Ha abierto nuevas posibilidades para conocer lo que pasa a nuestro alrededor y para mantener conversaciones con distintos actores (empresas, instituciones, partidos políticos, etc.). Sin embargo, el mal uso que se puede llegar a hacer de las nuevas tecnologías también da lugar a una serie de prácticas que deberían ser erradicadas.

Nos detenemos en tres prácticas a las que les falta rigor y ética:

– Copiar contenido: no es ético, ni tampoco legal utilizar el contenido elaborado de forma totalmente profesional por un periodista y convertirlo en una noticia propia. En ocasiones, es posible detectarlo, pero en otras es una tarea imposible.

– Engañar para conseguir el click: el llamado clickbait es una práctica en muchas ocasiones mal utilizada. No se puede inventar un titular sensacionalista que no tiene nada que ver con la información para conseguir clicks.

– Crear pseudomedios de comunicación: hoy en día es muy fácil como se diría coloquialmente “montarte un chiringuito”. Se compra un dominio, se crea un blog y ya tenemos un medio de comunicación para publicar lo que nos parezca (noticias falsas, contenido ajeno sin atribuir…).