¿Son los medios de comunicación independientes?

Me gustaría pensar que los medios de comunicación son independientes, pero es complicado serlo cuando las revistas, las cadenas de radio o los periódicos son negocios. Y actualmente pasan por malos momentos para tratar de mantener esa independencia. Muchos editores se ven obligados a tener que comprometer su calidad a las relaciones comerciales con las marcas. La pena es que hay revistas y periódicos que se convierten en folletos de propaganda del que paga.

Los medios de comunicación necesitan crear nuevas formas de financiación, porque las tradicionales  – basadas fundamentalmente en suscripciones y publicidad – no generan ingresos suficientes. Hay que asumir costes, entre ellos, las nóminas de los periodistas – que no trabajan por amor al arte por mucho que algunos se empeñen en ofrecer ofertas de trabajo sin sueldo – o los medios técnicos.

Para sobrevivir, la fórmula de regalar contenido mediante la compra de campañas de publicidad o la publicación de información condicionada a la inversión publicitaria está en el día a día de los medios de comunicación en nuestro país. Y la pena es que cada vez más. ¿En qué lugar queda entonces la calidad del medio?¿Y la ética del periodista?

Recordemos que los medios de comunicación son básicos para una sociedad informada. Si no podemos confiar en su independencia, ¿cuál es la solución? ¿Qué pueden hacer los medios de comunicación para seguir siendo independientes y no morir en el intento?

Entre las medidas, empezar a establecer muros de pago en las ediciones digitales o crear contenido exclusivos para suscriptores.

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